'Casas de pique', nueva modalidad de violencia en Buenaventura

Madres de jóvenes de Buenaventura (Valle del Cauca) relataron cómo se viene generalizando esa modalidad, también conocida como 'picadillo'. "Ahora no se oye tanto que los maten a bala, como antes, así como mataron a mi hijo. Ahora se los llevan, los matan, los descuartizan y los desaparecen", reveló una de las madres en un dramático relato. La mujer dijo que "aparece un brazo, una cabeza, miembros de la persona que han desaparecido". Consideró que "eso es más duro todavía porque a mi hijo yo lo enterré. Pero que le toque por partes, buscar una mano, un pie, eso es muy duro". En el crudo testimonio conocido, otra mujer contó que -incluso- los menores de edad están usando la palabra "picadillo" para amenazar a sus amigos o para hacerles bromas en medio de juegos. "'Picadillo' es que cogen a una persona, la torturan y la van desmembrando viva. Eso es una tortura muy fuerte. Eso es un proceso de violencia como muy normal y que ya la gente la utiliza. Dicen: 'Tranquilízate porque o si no te mando a picar'. Lo cogen como juego", indicó la mujer. Aseguró que dicha práctica se ejecuta tanto de día como de noche y que, aunque la gente sabe, no denuncia por temor. "La gente escucha los gritos (de las víctimas) y ve cuando entran (los asesinos) con las bolsas y los machetes", relató. En otro de los testimonios, una de las madres dijo que los grupos paramilitares son los que comenten dichos actos violentos, pero existe el miedo a denunciar."En el barrio pasó una situación así: un pelado muy joven fue y le dijo a la Policía que él sabía donde vivía el jefe del barrio. Al otro día llegó a donde el pelado el mismo jefe y le dijo que tenía que perderse o lo mataba (...) y le tocó perderse", relató. En el recorrido de RCN La Radio por los barrios de Buenaventura donde se ejecuta dicha práctica violenta, una madre que busca a uno de sus hijos, afirmó: "Hay un reclutamiento forzado sistemático que está muy estructurado. El hecho es que cogen a los niños desde los 8 ó 9 años y los envían a hacer mandados", subrayó. Denunció que a los menores "los inducen en el consumo de drogas y cuando comienzan a ser consumidores, son más dependientes del grupo". Reveló además que "últimamente se ha incrementado el tema de las niñas y la prostitución"."Lo único que le pido a Dios es que me digan dónde está mi hijo", dijo la mujer, con algo de desconsuelo.Siga las noticias de RCN Radio en Whatsapp