Mujer recibió cuerpo de su hijo 11 años después de buscarlo y el mismo día de su cumpleaños
La aparición de su hijo tuvo lugar en el cementerio de Apartadó, en el Urabá, y fue gracias a la Unidad de Búsqueda.
Por:
Mateo Zapata Correa
Búsqueda - Antioquia
Foto: RCN RADIO
Once años tuvieron que pasar para que doña Rosa Tuberquia volviese a ver a su hijo. En esta oportunidad, no pudo abrazarlo como de costumbre, pues su reencuentro puso fin a más de una década de angustia, tras conocerse su desaparición en el occidente antioqueño.
La Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas dijo que Edwin Alfonso Tuberquia, hijo de doña Rosa, desapareció en agosto de 2013 en el municipio de Peque, en Antioquia,justo cuando tenía 20 años.
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Desde entonces, sus familiares se dieron a su búsqueda y, según lo relataron, el pasado 12 de junio de 2024, el cuerpo de Tuberquia fue confirmado en el cementerio de Aparató, en la subregión del Urabá antioqueño
“En lo que pareciera una coincidencia de la vida, el 12 de junio de 2024, en desarrollo de la primera fase de intervención al Cementerio Central de Apartadó, realizada por la Unidad de Búsqueda en articulación con la JEP (Jurisdicción ESpecial para la Paz) y Medicina Legal, Rosa llegó al camposanto para participar en la recuperación de un cuerpo que podría corresponder al de Edwin, quien ese día, recordó ella, cumpliría 31 años”, dijo la Unidad de Búsqueda.
Sobre la entrega del cuerpo de Edwin, la Unidad de Búsqueda informó que esta tuvo lugar en el municipio de Peque. Incluso, fue gracias a la articulación de búsqueda del Eje Bananero y Cuenca de río Sucio y Cauca Medio, acción humanitaria que ya registra más de 3800 personas desaparecidas.
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Finalmente, la Unidad de Búsqueda informó que doña Rosa pidió que la entrega digna de su hijo tuviera lugar en el municipio de Peque, su tierra de arraigo y el último lugar donde compartió en vida con su familia.
En una emotiva ceremonia católica, su madre, sus hermanas, su sobrino y sus amigos cercanos rindieron homenaje a la vida de Edwin, escribieron mensajes en su memoria y celebraron las sonrisas que solían generar sus ocurrencias.
Fuente: Sistema Integrado de Información
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