Por: RCN Radio
Constantemente solemos estornudar para expulsar partículas no deseadas de nuestras fosas nasales. Esta acción es una respuesta refleja a ciertos estímulos, como el polvo, el polen o incluso la luz solar
Nuestro reflejo de estornudo es tan poderoso que podría causar un espasmo involuntario en todo nuestro cuerpo, liberando una repentina ráfaga de aire por la nariz y la boca a 160 kilómetros por hora.
No hay evidencia médica real que sugiera porque sucede, sin embargo, la teoría más popular es que es una respuesta evolutiva para ayudarnos a protegernos.
La respuesta científica a porqué nuestros ojos se cierran mientras estornudamos aún se está debatiendo.
Durante años han circulado mitos que no aconsejan estornudar con los ojos abiertos para reducir la probabilidad de que se les estallen los globos oculares. Pero esos son solo especulaciones.