Por: RCN Radio
La ingesta de licor muchas veces se sale de control y algunas personas terminan haciendo mezclas, que generan sensaciones de ebriedad más rápidas.
Ante esto, muchos expertos han respondido que lo que más importa a la hora de la mezcla de alcohol no es lo que mezcla sino la cantidad de alcohol que consume la persona, ya que esto puede traer serias consecuencias para la salud.
Y es que el hígado -órgano que generalmente procesa las bebidas alcohólicas- solo puede procesar de manera eficiente una sola bebida alcohólica de tamaño estándar por una hora.
El alcohol hace que se eleve más rápido la sangre que cuando una persona toma cerveza. Por lo que una persona que tienden a tomar licor antes que cerveza, es probable que sienta pronto y más rápido sus efectos.
Investigaciones arrojan que el agregarle licores más fuertes como el aguardiente, whisky o ron en grandes cantidades, puede conllevar a un grado de intoxicación fuerte, que provoque vómito constante y leve daño de la flora intestinal.
La explicación a esto es que hay diferentes tipos de licor que contienen algunos componentes que se llaman congéneres, y entre más cantidades de este elemento contenga la bebida, más posibilidades hay de que aumenten los síntomas del guayabo.