Por: RCN Radio
Las personas que se han recuperado de la covid-19 tienen una probabilidad significativamente mayor (60%) de sufrir problemas de salud mental, como ansiedad o depresión.
Incluso entre quienes no necesitaron ser hospitalizados pueden persistir o aparecer problemas relacionados con la salud mental en las semanas y meses posteriores a la fase aguda de la enfermedad.
Esos trastornos incluyen ansiedad, depresión e ideas suicidas, así como trastorno por consumo de opiáceos, drogas y alcohol, alteraciones del sueño y de la cognición.
En general, el estudio señala que quienes habían pasado la covid-19 tenían un 60 % más de probabilidades de padecer problemas de salud mental que las no infectadas.
Esto coincidió con un aumento del 55 % en el uso de antidepresivos y del 65% en el benzodiazepinas, para la ansiedad.
Además, tenían un 41 % más de probabilidades de sufrir trastornos del sueño, un 80 % más de experimentar lo que se conoce como niebla mental.